El Trono de Jazmín es el primer libro de la serie Reino en Llamas, de la escritora británica Tasha Suri, y que llega al mercado hispanohablante de la mano de Gamon+, el sello de fantasía juvenil de Gamon. Es una fantástica historia centrada en dos personajes, Priya y Malini, sirvienta y princesa prisionera respectivamente.

Ciertamente, el prólogo es desorientador y nos da una información que tardaremos en comprender, viendo el acto de entrega a las llamas. Posterior a esto, se nos introduce a Priya y su trabajo en el palacio, y a través de sus ojos vemos como una enfermedad que produce podredumbre se está extendiendo en el pueblo. Aunque puede ser contenida con la madera sagrada, esta cada vez es más escasa y difícil de conseguir.

Por circunstancias de su trabajo, Priya llega a conocer a la desconocida princesa prisionera, Malini, y acaba quedando como su cuidadora, llegando a discernir que está siendo lentamente envenenada por su superiora. Este fortuito encuentro da comienzo a una relación, primero de amistad entre ellas dos, y que acaba siendo un romance lento, y que además nos empieza a revelar tanto la verdadera naturaleza de Priya, una levantada de las aguas; y como Malini es prisionera tras la rebelión que hubo, y porque no aceptó su destino de ser entregada a las aguas.

Tanto Malini como Priya son personajes fuertes, y que poco a poco aceptarán que son más poderosas de lo que realmente parecen. La rebelión que se está produciendo en su ciudad también servirá como catalizador de la transición de estos dos personajes de simples personas impotentes a aceptar su papel como personas decisivas para el reino. 

El mundo de El Trono de Jazmín rezuma de detalles de la cultura hindú y de las tradiciones indias. Tanto la madera sagrada como el agua son referencias a detalles como el papel del Ganges en la religión tradicional, y en ese sentido el uso de términos provenientes de este mismo origen ayudan a darle más autenticidad.  

El ritmo narrativo es brillante, aunque sí que es cierto que muchas veces los elementos de romance han sido difíciles de digerir, siendo un poco la única crítica negativa que tengo de esta historia. Una vez la marca de las doscientas páginas ha sido pasada, la historia no deja descanso y poco a poco la base que se ha construido se empieza a usar para darle cabida tanto a los elementos de origen más fantástico y la verdad, están muy bien integrados en ella.

El Trono de Jazmín es una novela apasionante, merecedora de todos los premios que ha ganado. Para mí, ha sobrevivido al hype que tenía, y sin duda, me ha convertido en un fan de Tasha Suri. No puedo esperar a que la segunda parte de esta saga venga al mercado hispanohablante.